SIEMPRE CREÍ
Siempre creí que eras indestructible, compañero.
Siempre creí que después del adiós inesperado
que nos precipitó en el fondo del abismo
nunca me faltarían tus manos tan cercanas,
tu voz de terciopelo,
tu gentil bonhomía.
Siempre creí que al final del camino,
recorreríamos juntos la piel del universo.
mis pasos acoplados a tu ritmo.
Me has dejado de pronto hundida entre mis dudas,
con preguntas que nadie me contesta.
Pero espérame, amigo, no me demoraré.
Espérame a la puerta de tu Olimpo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario