LA AUSENCIA
Hoy me inunda hasta el alma
el sabor de la ausencia
en medio de un hogar deshabitado.
Un sabor algo insípido
de obsesivos silencios,
que el ruido de la lluvia
no consigue romper
ni tampoco los ecos
de voces que no existen.
Y en el centro de todo
su imagen anunciando
esa vuelta imposible de la nada.